Aire puro.

Jelu!

El sábado hice una de esas escapadas que tanto me gustan. Sí, esas que te cargan las pilas y te dejan petrificada por maravillosas vistas.

Dejamos Edimburgo a las 9 am, rumbo al sur, para cruzar la frontera escocesa y adentrarnos en tierras inglesas. 

Ya en la frontera se pueden apreciar algunas diferencias entre los "scottish" y los "english". Mientras que los escoceses te dan la bienvenida con un super cartel que a cualquiera le roba una sonrisa, los ingleses te indican la frontera con un "ENGLAND" tallado en piedra gris... Sin comentarios...

Nuestro primer destino fue Holy Island of Lindisfarne, una isla a la que se puede pasar cuando la marea te lo permite. En el lugar más destacado de ella, se puede ver un monte coronado por un castillo, (que algo tuvo que ver con Elisabeth I y La Armada Invencible):

Poco después de comer, rumbo de nuevo a Escocia, nos dirigimos hacia St. Abbs. Aquí emprendimos una marcha por colinas y acantilados que nos ocupó un par de horas, dejándonos estampas como estas:

Y poco más!!! Hoy ha sido el primer día de trabajo, así que ando algo cansada. Ya contaré como me va yendo.

- Fin de la conexión -